viernes, 7 de agosto de 2009

No quiero un hombre como el papá de Mariana

Mamá de Mariana: "me llamaron del colegio de Mariana, dicen que esta llorando
del dolor de panza"
Papá de Mariana: "Ah, mirá vos"
Mamá de Mariana: "creo que debería ir a buscarla"
Papá de Mariana: "no podés, tenés que laburar"
Mamá de Mariana: "pero se siente mal..."
Papá de Mariana: "que la contengan, para algo pagamos"

"A la mierda", pensé. ¿Qué carajo nos pasa?¿cuáles son nuestras prioridades?¿Por qué será que nos tratamos con tan poco respeto?. Pienso si cuando decidimos formar una familia con una pareja contemplamos la posibilidad de que se vaya todo a la mierda. Claramente no, sería una manera negativa de encarar un nuevo proyecto. Pero deberíamos contemplar esa posibildad, porque aparentemente hoy, es probable. La falta de respeto es común y cotidiana, a nuestras parejas, a nuestra familia, compañeros de trabajo, a los desconocidos, a todos. Ya no existe el otro, no nos importa. Y las prioridades están muy desdibujadas. Este es el origen de la manera de incomunicarnos que elegimos. Las prioridades son extrañas hoy por hoy y claramente no nos importa como se siente el otro respecto a nuestras prioridades, lo único que aparenta importar es avanzar, avanzar hacia no se que, porque ni siquiera sabemos que buscamos.
Ante esta situación entre los padres de Mariana, que presencié rogando pasar desapercibida para no perderme ni un segundo de esa conversación, pensé que yo no quiero un hombre para mí como el papá de Mariana, ni ser tan infeliz como la mamá de Mariana. Creo que voy por el camino equivocado:
El viernes pasado salí con el susodicho. Como cada vez que lo veo, puedo pasarme horas mirándolo, sus ojos raros, su nariz enorme (raro porque estoy obsesionada con las narices, es lo primero que miro), sus marcas en la cara, todas sus imperfecciones que podría enumerarlas una por una y que me encantan. Hablamos muchas horas, vino de por medio, cada cosa que hablábamos me hacía gustar de el mas que nunca. y por un rato sentí que era recíproco, sobre todo cuando él decidió hablar de nuestras idas y vueltas, mi ironía, sobre como el sospechaba que yo salía con otras personas (¿?), y sobre que yo era el tipo de chica con la que "almorzaría" (¡¿?!), en fin por un rato me sentí bien, muy bien. El domingo le mandé un mensaje de texto... sin respuesta. Después de inventarme las mil y un excusas posibles para justificar su no respuesta, el jueves le mandé otro mensaje de texto... sin respuesta. ya sé, pensarán " por qué carajo no lo llamaste si querías hablar con el". Y tengo la respuesta. Creo que sentí el rechazo cerquita cerquita, conozco este idioma, porque yo también lo uso. No tolero el fracaso, menos el rechazo. y bueno preferí seguir haciendome la boluda hasta que una muy amiga, me puso la verdad en la frente usando la frase que inmortalizo la película: "... o tal vez, simplemente no te quiere...". Hoy, día gris, borré su número de mi celular para resistir la tentación. No quiero un hombre como el papá de Mariana ni ser tan infeliz como la mamá de Mariana

3 comentarios:

Anónimo dijo...

Hola Juguemos a ser novios!! creo que nunca mejor puesto el nombre a TU blog, Empiezo por decir (mi opinión porsu), que un hombre como el papá de Mariana, egoísta,"NO PODES, TENES QUE LABURAR", soberbio"QUE LA CONTENGAN, PARA ESO PAGAMOS", y otras tantas, esta claro que no lo queres para vos, yo tampoco lo quiero para mi.Pero es probable tambien que hombres como "el susodicho" con el tiempo, poco tiempo, también se conviertan en eso, porque ya es egoísta, soberbio y otra pila de cosas que se me ocurren de ese @#:/_@,; tal vez estaría bueno que repaces tus entradas del 21/7 GOL EN CONTRA, del 23/7 PARA PASAR EL RE....,y la del 2/8 RESACA DE INFORMACIÓN. y sabes que a la MER CON ESTE GIL!!Hagamos todo para que ellos LABUREN "para que a nosotras nos gusten, que se ganen nuestro interes" y esten pendientes de nuestro llamadito, y sino que a tiempo les digamos "sabes que darling...SEGUI PARTICIPANDO".

Anónimo dijo...

Ahhh!! JUGUEMOS A SER NOVIOS, me quedo por agregar que en el DIARIO DE TU REALIDAD, como siempre admiro tu observación (mamá y papá de Mariana)y tu lucha Cual Juana de Arco, por recomponer el respeto, las prioridades y otras tantas situaciones que complican todo, PERO TODO TODO, UNA VEZ MAS CONGRATULATION.

Anónimo dijo...

bien